Comercio electrónico hace referencia a todas aquellas operaciones comerciales que se realizan a través de medios electrónicos, el término tuvo su origen cuando la web e internet se integraron a los negocios.
En la última década esta actividad ha crecido exponencialmente, internet y la web han permitido que los avances tecnológicos se efectúen a una velocidad incontrolable, las barreras en comunicación y movilidad han quedado atrás gracias a estos dos actores, hoy no se necesita estar en un lugar para saber lo que pasa ahí, solo se necesita dar un vistazo a una red social o ingresar una palabra en un buscador en la web para encontrar información actualizada casi ilimitada sobre cualquier tema.
Las industrias, el comercio, las formas de interacción y casi todo lo que nos rodea ha sido transformado o redefinido gracias a internet y la web.
Ventajas del Comercio Electrónico
La incorporación de recursos tecnológicos al trabajo y a los negocios ha permitido reducir la brecha económica que separa emprendedores, Pymes[1], y grandes corporativos, estudios demuestran que los negocios que utilizan internet para comercializar sus productos o servicios logran un incremento de ventas del 8% al 25%, además de otros beneficios, como:
- Servir a mercados más grandes.
- Optimizar la utilización de recursos.
- Mejorar la gestión de relaciones con los clientes.
- Mejorar la imagen de marca.
- Mejorar la gestión de la oferta.
- Incrementar el margen de utilidad.
El comportamiento de los consumidores también se ha visto transformado por la web e internet, el consumidor gracias a los nuevos entornos de comunicación e interacción social ha adquirido mayor poder, su voz expresada a través de estos entornos crecientes, tiene una influencia y un alcance casi ilimitado, consolidando a la experiencia de consumo como un factor clave para el desarrollo y consolidación de productos, servicios y negocios en el mercado.
La idea de establecer un negocio en un entorno digital puede generarse desde la necesidad de ampliación de un negocio convencional hacia la red, o puede ser una propuesta que tiene como punto de partida la implementación de recursos digitales en la red para generar algún tipo de beneficio.
Un modelo de negocio en un entorno digital al igual que un negocio convencional conforme al tamaño del mismo requerirá consumir factores de producción:
- Trabajo (Personas).
- Tierra (Infraestructura).
- Capital (Dinero).
De igual forma un modelo de negocio en un entorno digital estará sujeto a leyes y normas, que se establecen[2] para regular sus actividades y procedimientos, da igual si un el modelo de negocio a implementar es la ampliación de un negocio convencional o es una propuesta que empieza desde cero, para los dos casos se necesitará establecer y diseñar una nueva estructura basada en procesos de mejora continua aplicando conceptos de calidad en sus operaciones con la finalidad de permanecer en el mercado y obtener la mayor rentabilidad de sus actividades.
El volumen de recursos a utilizar y la escalabilidad del modelo de negocio marcan la diferencia entre una idea de negocio a ser implementada como negocio “pequeño” a una idea de negocio a ser implementada como organización, la web ha permitido que negocios “pequeños” puedan subsistir sin mayor problema en su entorno, para los dos casos es importante tener conocimiento del entorno en el que se va a desarrollar la actividad, así como los pilares y estrategias del éxito en el entorno digital.
“Toda empresa nace pequeña pero no tiene por qué permanecer así”
[1] Pequeñas, medianas y micro empresas.
[2] Las leyes pueden ser de alcance nacional, regional o internacionales.